• SABÍAS QUE...
    • De cada 3 litros de leche que se producen en Chile 1 proviene de la Región de Los Ríos
    • El consumo de lácteos en Chile bordea los 150 litros per cápita
    • Río Bueno es la comuna que más leche produce en Chile (15%)

FNE archiva investigación sobre mercado de producción y procesamiento de leche

  • Noticias
  • 20 abril 2018
  • http://www.fne.gob.cl

Durante el curso de su investigación, la FNE analizó las condiciones
de competencia de largo plazo entre empresas procesadoras y el impacto
que éstas tienen en los precios pagados a los productores por la leche
fresca.

Para esto, se observó los movimientos de precios de compra de leche
publicados por las plantas procesadoras (denominadas Pautas de Precios)
de un período de casi diez años, ya que sólo cambian una o dos veces por año.

En el análisis, se confirmó una reducción paulatina de la intensidad
de la competencia en el mercado de aprovisionamiento de leche cruda que, sin embargo, no es atribuible a conductas específicas de abuso de poder de mercado (sea individual o colectivo) imputables a las empresas
investigadas.

La FNE concluyó que este detrimento de la competencia se explica por
condiciones estructurales del mercado y que las medidas para resolverlos exceden el ámbito de la persecución de ilícitos anticompetitivos. Esto
es confirmado por la experiencia internacional, que ha abordado los
problemas de la industria láctea recurriendo a otro tipo de herramientas público-económicas para buscar su corrección, con distintos niveles de
éxito.

En ese sentido, al término de su investigación, la FNE presenta
algunas sugerencias sectoriales que han sido utilizadas a nivel
internacional para promover la intensidad de la competencia en este
mercado, enfocadas en (i) incrementar el poder de negociación de los
productores y reducir la capacidad de los procesadores de imponer
precios y condiciones de compra de leche cruda; (ii) reducir la
interdependencia entre empresas procesadoras, dinamizando la competencia entre plantas y en los productos finales; y (iii) mejorar las
condiciones de entrada para nuevos procesadores con menor escala.