• SABÍAS QUE...
    • De cada 3 litros de leche que se producen en Chile 1 proviene de la Región de Los Ríos
    • El consumo de lácteos en Chile bordea los 150 litros per cápita
    • Río Bueno es la comuna que más leche produce en Chile (15%)

Acoso empresarial

  • Noticias
  • 26 octubre 2015
  • Edgardo Zwanzger Presidente Aproval Leche A. G.

El tema nos preocupa profundamente, ya que en algunos casos se trata de destacados empresarios fundadores de nuestra institución.

La señal no es buena. Detrás de una decisión de esta naturaleza confluyen diversas razones de carácter personal que por cierto respetamos, pero hay dos factores que están jugando un rol clave en la proyección del negocio.

Por un lado, las condiciones del mercado respecto de las cuales no existe la certeza de que estén operando con la transparencia necesaria. La concentración de los poderes de compra y la atomización de los proveedores, sumado a la inexistencia de un consenso claro y compartido sobre los factores que influyen en el precio de la materia prima, hacen que persista un escenario de desconfianza que amerita una urgente revisión.

Por otro lado, está el cada vez más agobiante contexto normativo que está presionando a los productores de leche.

Desde Aproval, hemos hecho importante esfuerzos – y seguimos haciéndolos – para apoyar a nuestros asociados en el cumplimientode las normas laborales, de seguridad, ambientales y de otros tantos ámbitos que están acosando las actividades productivas.

Sin embargo, hemos constatado que se trata de un cuento de nunca acabar. Cada cierto tiempo van apareciendo nuevas exigencias que complejizan las relaciones laborales y el desempeño razonable de las empresas.

Hace unos días comentábamos cómo nuestros colegas en Estados Unidos gozan de un contexto muy favorable a la inversión y al desarrollo de las actividades productivas. En las lecherías sólo circulan trabajadores, asesores y todos quienes tengan que ver con la actividad productiva.

A diferencia nuestra, donde en el último tiempolas lecherías son el destino recurrente de diversos organismos fiscalizadores que en muchos casos ni siquiera comparten criterios comunes respecto de un mismo tema.

Ni hablar del “espíritu” de algunas exigencias, como las jornadas de trabajo, pensadas en fábricas o industrias y que desconocen absolutamente las particularidades de un proceso biológico como la ordeña.

Cada vez son más recurrentes los llamados de nuestros asociados que sufren el verdadero acoso de estos organismos. Ni hablar de la desesperación e impotencia quesignifica atender estas “visitas” en medio de la lucha por sobrevivir en el negocio durante la sequía más severa del último medio siglo o justo cuanto el precio de la leche apenas cubre o ni siquiera alcanza a cubrir los costos como ha ocurrido esta temporada.