Cabe recordar que el año pasado la lechería brasileña exportó un volumen récord, pero aún así, continuó manteniendo un déficit.
Según Rabobank, el crecimiento de la producción interna brasileña y la desaceleración de la demanda, pueden presionar los precios de la materia prima a mitad de año, trayendo consigo una remuneración más baja para los productores del sector.
A la vez, el análisis sostiene que las exportaciones de lácteos brasileños pueden perder competitividad, con consecuencias sobre mercados tradicionales para las industrias brasileñas, como es el caso de Venezuela y Medio Oriente.
Esos mercados fueron los que el año pasado justificaron el crecimiento de las exportaciones.
También estima la consultora que la industria láctea brasileña deberá promover la innovación a lo largo de todo el año para apuntalar los logros generados hasta el momento y para conquistar nuevos potenciales consumidores en el mercado interno y el exterior.