En el informe se muestra una mejoría gradual y continua en el ahorro energético y en la reducción de emisiones de gases que contribuyen al efecto invernadero.
Desde el año 2011, auditorías han identificado un potencial de ahorro energético de 55 millones de btus y de reducción de gases de efecto invernadero por 11 millones de toneladas métricas de CO2 equivalente.
Por otro lado, se han puesto en operación 12 digestores de metano en lecherías, alcanzando más de 200 digestores a lo largo de EE.UU. Estos han generado una energía renovable a más de 7 millones de btus equivalente a retirar casi un millón de autos de las calles.
La pérdida de comida es otro tema relevante del reporte, ya que hoy en día el 40% de la comida producida en EE.UU. es desperdiciada. Respecto a esto, la industria láctea se centra en alimentar en primera instancia a las personas, luego a los animales y finalmente, devolver los nutrientes a la tierra.
A través de esfuerzos por parte de productores y minoristas se han creado una gama de nuevos productos y opciones saludables capaces de satisfacer necesidades nutricionales con una variedad de gustos para todos los consumidores. De esta manera, se ha invertido en entregarles a las vacas una dieta saludable para mantenerlas productivas y sanas.
